Evan O’Neill Kan: el primer médico en realizarse una operación a sí mismo

el primer médico en realizarse una operación a sí mismo

el primer médico en realizarse una operación a sí mismo

Evan O’Neill Kan fue el primer hombre en realizarse una operación a sí mismo cuando en 1919 el cirujano, usando cocaína como anestesia local, amputó su propio dedo luego de sufrir una infección masiva por un corte en la piel.

En 1921, luego de un diagnóstico de apendicitis severa, colocó varias almohadas en su espalda para mantener la vista elevada, se aplicó mínimas cantidades de Novocaína (que había reemplazado a la cocaína como anestesia local) y empezó a cortar su abdomen.

Con cuidado fue separando el tejido, mientras suturaba los vasos sanguíneos, para evitar una hemorragia.

Al terminar la incisión en el abdomen, insertó sus dedos para palpar el apéndice y empezó a cortarlo.

Tuvo que inclinarse hacia adelante para poder ver lo que hacía y por el movimiento, sus intestinos se regaron sobre sus piernas.

El doctor Evan O’Neill Kan recuperó rápidamente las entrañas y con paciencia las fue ordenando al interior del abdomen.

El doctor O’Neill mantuvo la calma todo el tiempo.

Cuando concluyó, suturó la herida con la firma que dejaba en todos sus pacientes operados: una K en código morse (— · —).

La operación fue un éxito y llevó al doctor a la fama, con varios artículos en la prensa donde explicó que hizo esta operación en si mismo para demostrar algunas de las innovaciones que había creado para las cirugías; sobre todo el uso de anestesia local en lugar de anestesia general.

Además quería darle seguridad a los pacientes que tenían miedo de ser intervenidos.

En 1932, a los 70 años, O’Neill quiso volver a realizar una hazaña médica y se operó una hernia inguinal.

Esta vez, fotógrafos y reporteros visitaron el quirófano para registrar el evento. Esta operación tenía más riesgo que la anterior por la posición en la que tuvo que operar y por el riesgo de rasgar su arteria femoral.

Logró extirpar la hernia pero tuvo complicaciones en la operación. La herida se infectó y debido a la edad avanzada del doctor O’Neill, desarrolló una neumonía de la que nunca se pudo recuperar. Esta auto-cirugía  terminó con su vida una semana después.

El doctor O’neill Kan realizó más de 4000 operaciones y fue uno de los principales innovadores en el campo de la cirugía.